El Consejo Europeo ha aprobado el nuevo Reglamento sobre las actividades de calificación ambiental, social y de gobernanza (ESG). Esta legislación tiene como objetivo principal hacer que las actividades de calificación en la Unión Europea sean más coherentes, transparentes y comparables, con el fin de aumentar la confianza de los inversores en los productos financieros sostenibles.
Las calificaciones ESG son esenciales para evaluar el perfil de sostenibilidad de una empresa o de un instrumento financiero, considerando sus efectos en la sociedad y el medio ambiente, así como su exposición a riesgos relacionados con la sostenibilidad. Con las nuevas normas, se busca reforzar la fiabilidad y la comparabilidad de estas calificaciones, potenciando la transparencia y la integridad de las actividades realizadas por los proveedores de calificaciones ESG y previniendo posibles conflictos de intereses.
Los proveedores de calificaciones ESG deberán estar autorizados y supervisados por la Autoridad Europea de Valores y Mercados (AEVM) y cumplir con una serie de requisitos en materia de transparencia, especialmente en lo que respecta a los métodos y fuentes de información utilizados. Además, los proveedores establecidos fuera de la Unión Europea que deseen operar en la UE deberán obtener una validación de sus calificaciones ESG o un reconocimiento basado en un criterio cuantitativo, o estar incluidos en el registro de proveedores de calificaciones de la UE.
La Comisión Europea presentó esta propuesta de Reglamento en junio de 2023. El Reglamento se publicará en el Diario Oficial de la UE, entrará en vigor 20 días después y comenzará a aplicarse 18 meses después de su entrada en vigor.
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